Para empezar con pilas la semana, elegí compartir el turquesa intenso que eligieron Gon y Ro para la pared de su living.
¡Lejos de mí querer emular a
Casa Chaucha! que es inimitable y pura inspiración, pero es que desde que empecé con el blog me detengo más en las cosas que estimulan mis sentidos. Y esta es una de ellas.
Los chicos hicieron una remodelación en su casita de una planta que está rodeada por un inmenso jardín lleno de verde, y escoltada de cerca por un alcanfor, en las afueras de Buenos Aires.
Resulta que tenían la cocina integrada al comedor y el living, y decidieron hacer una división con placas de yeso en forma de L para cerrar la cocina. La pared no llega hasta el techo, que es bastante alto, pero claramente sirvió para separar visualmente los ambientes que ahora parecen más grandes, y para optimizar el espacio.
La misma cantidad de metros cuadrados, pero sensación de mayor amplitud y la casa más ordenada. Sin duda acertaron.
Pero volviendo a lo que me llama a escribir este post, el color que eligieron para la pared del living que da a los cuartos les quedó increíble. Es un preparado que le hace honor a su nombre, Mar Caribe, y que es puro carácter.
Energiza, alegra, atrae y calma.
Las fotos las saqué con el teléfono de #marido. Me hubiera gustado usar luz de relleno, pero no contaba con nada a mano un domingo familiar por la tarde, con toda la fiaca que ese momento trae aparejado. Y tampoco quería perderme los mates en familia en el jardín. Y como esto es un hobby -al menos por ahora, ja!-, la única luz que ilumina es la del sol entrando por la puerta abierta de par en par. No hace falta que les cuente de qué lado ¿no?
El nuevo color hace que, por contraste, la madera de los muebles antiguos se destaque mucho más.
Así fue como me detuve en el detalle de este sillón de estilo Luis XV que había visto muchas veces antes, pero sin verlo.
Notas al pie: si el estilo del sillón no es Luis XV me avisan por favor así aprendo.
Una de las mejores cosas de todo esto es que el cambio lo hicieron los dueños de casa, lija y brocha en mano.
La beba de la foto ya dejó de serlo, ahora camina, habla y canta, y todos felices :).
¡Buenas semana de 5 días hábiles!
Los que viven en Argentina saben de lo que hablo. Oh my God, allá vamos.